Nuestro O₂ fue forjado hace miles de millones de años en el corazón de estrellas que explotaban. A lo largo del tiempo, el O₂ atmosférico ha variado del 0% al 35%, estabilizándose en el 20.9% actual.

Durante la Segunda Guerra Mundial, el O₂ medicinal se difundió gracias al Ejército de los Estados Unidos, suministrándolo a pacientes cianóticos a una tasa de 2 a 5 lpm. En el avance de Vietnam, se eliminó el O₂ líquido utilizado por los aviadores.

Desde 1950, los aviones militares utilizaban LOX, ahorrando peso, volumen y logística.

Con la llegada de la "Generación 4 de Aviones de Combate" en la década de 1980, se redujo drásticamente el uso de LOX, ya que las aeronaves comenzaron a utilizar generadores de O₂ a bordo, utilizando el aire de purga del motor para alimentar un sistema PSA, eliminando el LOX en los vuelos de la Fuerza Aérea Americana.

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Sin embargo, el Ejército, la Marina, la Fuerza Aérea y los Hospitales de Campaña (HC) necesitaban un suministro confiable y una logística eficiente de O₂ médico, ya que el oxígeno sigue siendo una carga logística enorme para los militares en el campo (el 17% de las bajas de combate requieren su uso y un HC con 100 camas consumiría 7.000 kg/día de cilindros de oxígeno).

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Reconociendo el enorme impacto que el uso de O₂ tiene en la logística militar y en situaciones de pandemia, SeparAr ha desarrollado el GMM, un generador de oxígeno y aire medicinal capaz de generar estos gases directamente en el punto de uso. El GMM es asequible, confiable, liviano y de pequeño volumen, lo que permite su transporte en camionetas, camiones, helicópteros y barcos utilizando la logística militar o civil existente.

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Ventajas de la generación de O₂ y aire medicinal donde sea necesario: el GMM es la solución lógica para generar O₂ y aire medicinal "in situ" para uso de las Fuerzas Armadas y Defensa Civil, ya que elimina la dependencia externa de reabastecimiento.

Operado de forma automática e instalado con una logística mínima, solo necesita un generador eléctrico, que puede incluirse en el suministro. Al evaluar el alto riesgo y el costo logístico de adquirir y transportar O₂, un producto de consumo continuo que siempre se agota en el peor momento, se concluye que:

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• Generando O₂ a través del GMM "in situ", este suministro nunca se interrumpirá.

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• Un solo día de operación puede consumir el peso de un cilindro de O₂ equivalente al peso del GMM Explore, y este último se envía solo una vez.

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• Los generadores de O₂ "in situ" se utilizan en las fuerzas de defensa más modernas del mundo y están recomendados a nivel mundial para uso militar y civil.

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• Sistemas de vacío y aire medicinal incorporados bajo consulta.